En estas líneas se resumen los datos referentes a este tema y damos nuestra opinión sobre esta situación que nos concierne
Importancia de la investigación
En todo proceso de desarrollo, ya sea de un campo académico o incluso de la misma sociedad, es necesaria la investigación. Podemos decir que la investigación es la mayor herramienta que posee el ser humano para aprender de su entorno y, por lo tanto, prosperar.
El éxito de un país es habitualmente valorado por sus políticas macroeconómicas o por presentar grandes oportunidades de mercado. Sin embargo, la investigación es un aspecto clave en ese éxito. Presentar tecnologías innovadoras y actualizadas y hacer estudios que permitan la conservación y desarrollo de la sociedad forma parte de una clave indispensable para el progreso.
Situación de la investigación en España
En el 2020 España no superó el 1.5% de PIB en gastos para investigación, en cambio más al norte, Alemania, invirtió un 3% de PIB en la investigación. Sin duda esto deja muy clara la situación de la investigación en España.
La verdad que pasa desapercibida se encuentra en la investigación dentro del sector privado. Y es que, a diferencia de Alemania, donde las empresas invierten de media un 1.5% en I+D, en España este dato llega a 0,7% a duras penas.
En el sector público, donde se encuentra la mayoría de doctores, la investigación tampoco cuenta con amplios recursos. Como bien es sabido, la investigación no solo requiere de profesionales especializados y una aparatología que, por lo general, es costosa de adquirir y de mantener, requiere en gran medida un plan que ha de ser trazado de forma que se busque la sostenibilidad.
Situación de la investigación sobre plantas medicinales
En nuestro país la investigación en torno a las plantas medicinales y la etnobotánica es prácticamente inexistente, siendo las comunidades autónomas de Madrid y Cataluña las que poseen mayor cantidad de grupos asociados al CSIC.
Actualmente en España existen diversas sociedades académicas que investigan en el campo de la botánica, la fitoterapia como la SEBOT (Sociedad Española Botánica) y la SEFIT (Sociedad Española de Fitoterapia), sin embargo, la etnobotánica es la gran olvidada. Si bien es cierto que en algunos grupos se desarrollan proyectos entorno a la etnobotánica y la etnofarmacología, la realidad es que esta se encuentra prácticamente en camino a la extinción.
Apenas existe financiación pública y privada en este ámbito y la investigación en el mismo se reduce a asociaciones y personas por cuenta libre interesadas en el área.
En países como Alemania, el estudio de las plantas medicinales de uso tradicional (una parte de estudio de la etnobotánica) se constituyó de manera fuerte, creando monografías de gran calidad como las pertenecientes a la COMISIÓN E. Esto hizo de Alemania un titán del conocimiento fitoterapéutico en Europa y es uno de los países que más consumen este tipo de productos.
Opinión
Sin lugar a duda, gran parte del avance médico y tecnológico se debe a las oportunidades que nos ofrece la naturaleza, los vegetales. Pensamos que conocemos todo sobre las plantas, pero la realidad es que lo que conocemos no es más que la punta del iceberg.
El hecho de no investigar en la etnobotánica, supone una pérdida de información relevante en cuanto al uso de las plantas. En realidad, muchas de las que actualmente consideramos “malas hierbas” como lo es la hierba mora, la verdolaga y el diente de león fueron en el pasado grandes medicinas, pero que, en la actualidad, por ignorancia de su uso y posología quedaron proscritas al olvido.
Posiblemente, por ignorancia de nuestras limitaciones, estamos dejando pasar por alto auténticas posibilidades en medicina, industria y muchos otros campos. Todo esto, puede deberse en gran medida a una visión simplista entorno a la etnobotánica, considerándola como una ciencia anticuada y de poco nivel.
En España, el uso de plantas medicinales muchas veces es considerado como un estigma social, en especial, cuando es usada de forma tradicional, aunque esto cada vez más va cambiando.
Las instituciones privadas y públicas que trabajamos con la fitoterapia y con las plantas debemos, dentro de nuestras posibilidades, mantener vivo ese conocimiento ancestral que ha permitido la supervivencia durante siglos y traerlo a la vida, renovado y adaptado a nuestros tiempos.
Con una planta o uso de ella por descubrir, podemos tener la respuesta a diferentes problemas de salud, medioambientes y muchos otros, así como preservar el conocimiento botánico, que forma parte de nuestro patrimonio inmaterial.
~Instituto de Herbología Sarela~
Comments